Desde muy joven trabajó en diferentes revistas y periódicos, sobre todo para el Diari de Sabadell, del que llegó a ser su director y donde firmaba como Senyor Banyeta.
En este periódico local publicó crítica cinematográfica, en la que plasmó su fascinación por el cine mudo, especialmente por figuras como Charles Chaplin, Buster Keaton y King Vidor, cineastas que impactaron en su obra novelística.
El modelo novelístico de Francesc Trabal se caracteriza por el erotismo, el humor y una concepción narrativa innovadora en el panorama de la literatura catalana de la época al adoptar, bajo el influjo del grupo vanguardista liderado por Jean Cocteau, la estética cinematográfica.
[2] Si bien recibe influencias del simbolismo francés, su aportación es personalísima y original, tanto en la narración como en la historia.
Sus novelas más reeditadas son Judita y Vals.