Fue el penúltimo hijo de los siete que tuvieron Juan Selgas Campo (1790-1871) y Josefa Albuerne García (1800-1861).
Gracias al apoyo económico de Ezequiel, Fortunato estudió bachillerato en Oviedo licenciándose en 1856 e ingresando en la Universidad de Oviedo para estudiar Derecho Civil y Canónico licenciándose en 1864.
Actualmente la Quinta de Selgas está abierta como museo y ha llegado a recibir 24.000 visitas anuales, si bien suele cerrar en determinados meses.
Por todo ello, influyó en la creación de un Museo Municipal, inexistente hasta su iniciativa.
A partir de entonces repartía sus estancias regulares entre Madrid, Asturias Y Játiva.