El HMS Queen Elizabeth se convirtió en el buque insignia de la Flota del Atlántico y sirvió en esa capacidad hasta 1924.
La flota nunca participó en batalla naval alguna en su corta historia.
Los marineros de la flota se negaron abiertamente a obedecer las órdenes por una disputa salarial provocada por el gobierno en ese momento.
[5] El título de mando de la flota fue designado como Commander-in-Chief, Atlantic Fleet entre 1910-1912, sin embargo el cargo fue ocasionalmente establecido como Vice-Admiral Commanding, Atlantic Fleet.
[9] El cargo desapareció con la refundación de la Flota del Atlántico tras la Primera Mundial.