Fisiología del gusto

La función del gusto es permitir la selección de alimentos, distinguir sustancias venenosas para no ser consumidas.

Sabor integra todo la información sensitiva recibida en la boca: olor, gusto, textura, temperatura.

El gusto, en cambio, nos da información sobre la identidad de los elementos, su concentración y afectividad (agrado o desagrado).

No solo permite disfrutar de los alimentos, sino que también es útil para distinguir entre las sustancias nutricionalmente adecuadas para el cuerpo y aquellas que podrían representar una amenaza por su toxicidad o estado de conservación (si algo está podrido, por ejemplo).

El primer estímulo gustativo hace que las fibras nerviosas alcancen una velocidad de descarga máxima, pero después regresa a un nivel bajo y estacionario.

El estímulo gustativo hace que la célula receptora se despolarice y emita un potencial de acción, que será transmitido a la neurona siguiente, y así seguirá el camino del nervio recién estimulado.

Localización de las papilas gustativas
Imagen con diversas papilas gustativas
Imagen con diversas papilas gustativas