La final de la Eurocopa 1988 se disputó el 25 de junio de 1988 para determinar el campeón del Campeonato Europeo de fútbol de Naciones de 1988.
El partido enfrentó a la Unión Soviética, en la que sería su última Eurocopa antes del colapso del país, y la selección de Países Bajos en el Olympiastadion de Múnich.
Los neerlandeses ganaron la final por 2–0, con goles del capitán Ruud Gullit y del máximo goleador del torneo, Marco van Basten.
Hans van Breukelen detuvo un penalti a Igor Belanov en el transcurso del partido.
El posterior gol de Van Basten a Rinat Dasayev —uno de los grandes porteros del mundo en ese momento— fue calificado como uno de los mejores goles en la historia de las Eurocopas.