Filippo Scelzo

Nacido en Ivrea, Italia, su familia estaba dedicada al mundo del espectáculo, pues su madre, Lena Artale, era actriz, y el padre, Gregorio Scelzo, utilero).

Tras la Primera Guerra Mundial, Scelzo entró en la compañía de Ruggero Ruggeri en 1920.

Actor sobrio, comedido y distinguido, actuó junto a los mejores intérpretes del teatro italiano del siglo XX mostrando su rigor y su tono irónico sobre todo en obras como Julio César (1949) de William Shakespeare, Caterina da Siena (1953, de Cesare Vico Lodovici), y Giuda (1956, de Marcel Pagnol).

Su debut en la pantalla llegó en 1934 con el film Teresa Confalonieri, de Guido Brignone, siguiendo en activo hasta 1972, cuando interpretó su última película, Bronte - Cronaca di un massacro che i libri di storia non hanno raccontato, de Florestano Vancini.

Scelzo actuó por vez primera en la televisión en L'Affare Kubinsky (1954), producción dirigida por Anton Giulio Majano, actuando después esporádicamente en algunas comedias y en el drama La vita di Leonardo da Vinci, de Renato Castellani (1971).