Fiesta de Las Marías

Se conmemora la Festividad del Dulce Nombre de María.

La promesa se hizo en la Montaña de Vergara, en la cual hubo reacción inmediata puesto que de allí a pocos instantes, se vieron unas nubes que subían desde el mar y que al llegar sobre las tierras, descargó en lluvia torrencial arrasando en pocos momentos la cigarra y alejando en forma tan milagrosa la devastación y la ruina que se sufría en toda la comarca del norte de la isla.

Es una manifestación heredada desde los antepasados que se ha ido transmitiendo de generación en generación hasta nuestros días y que, a pesar de los años, se conserva tal cual.

A pesar de ello, no intervienen representaciones de orden superior, y las tradicionales representaciones políticas y militares se ven suprimidas, convirtiéndose así, en la fiesta del pueblo.

En esta procesión se acompaña a la Virgen en su recorrido para pagar el solemne voto promesa, en la cual desde su inicio hasta su finalización, la procesión es por el estruendo de las caracolas, por el rítmico compás que introducen tambores y cajas de guerra, así como por hermosos ramos.

Pro dicha romería transcurren carruajes y carros tirados por yuntas, las cuales deben cumplir ciertas normas estéticas, así como los romeros.

Concluida la Romería-Ofrenda la Virgen entra en su Templo con una singular traca de despedida, acompañada por los mayordomos que agrupados entran simultáneamente, mientras que se estremece el Templo con el fragor de los bucios y las caracolas.