Fernando Rielo Pardal
A los quince años había leído "Fabiola", la obra del Cardenal Wiseman, se hizo una pequeña incisión en la mano y con su propia sangre escribió la Sacra Martirial: Te prometo, Señor, vivir y transmitir el Evangelio con el sacrificio de mi vida y de mi fama, fiel al mayor testimonio de amor, morir por Ti [2] [3] .En 1941, cuando se hallaba terminando el bachillerato en el Instituto San Isidro de Madrid, quiso alistarse en la División Azul con el único afán de defender la fe de su patria, pero su padre enfermó gravemente y tuvo que dejar los estudios y dar una orientación profesional a su vida.Recibió formación en Nava del Rey (Valladolid) y en Astorga (León); lugar donde, mientras se preparaba para ser ordenado sacerdote, fundó en 1951 el movimiento Christus [8] , con la finalidad de impulsar la vivencia íntima de la vocación y acrecentar la fidelidad al carisma de la congregación (inspirados en este movimiento, los misioneros identes promueven el Motus Christi).Este prelado falleció en agosto de 1961 sin poder darles curso, y con su muerte comenzaron momentos difíciles para la Institución que causaron gran dolor a su Fundador.En 1967 inició una intensa correspondencia epistolar con Pablo VI, que se prolongó durante todo su pontificado, haciéndole entrega de su doctrina.Le dio a conocer el modelo filosófico que había concebido con objeto de responder a los interrogantes que el ser humano viene planteándose desde hace siglos.Sufrió varias intervenciones quirúrgicas, algunas de las cuales pudieron costarle la vida, pero no fue impedimento para recorrer todas las fundaciones.Esta Fundación colabora con varias universidades y centros de cultura e investigación.Su colección Azul de poesía fue presentada en distintas universidades españolas y extranjeras, siendo traducida a varios idiomas, entre otros, al sueco.Algunas de estas obras fueron prologadas por personalidades tan destacadas como Alonso Zamora Vicente, Hugo Petraglia Aguirre, Jaime Montesinos, Gonzalo Torrente Ballester y Odón Betanzos.Durante todos esos años su delicada salud había dado ya muchos sobresaltos, teniendo las enfermedades distintas manifestaciones y numerosas secuelas.Allí, mientras su organismo maltrecho se iba deteriorando progresivamente, continuó su labor apostólica de orden social, fundamentalmente con inmigrantes.Años atrás había accedido a quedar al margen de la misma y no influir en el sentir de sus hijos, como le fue solicitado por altas instancias eclesiales, por lo que en este reconocimiento, tan sufrido y anhelado por él, no se contemplaba su nombre.Al inicio del tercer milenio las lesiones físicas se multiplicaron, debilitándole progresivamente.También cinéfilo, dirigió cineforums; sentía especial admiración por Sir Laurence Olivier y Bette Davis.Su obra filosófica y poética tiene como finalidad llevar al hombre a Dios.[15] En Hacia una nueva concepción metafísica del ser (1988) afirmó que El estudio de esta metafísica genética parece aportar el convencimiento de que el cristianismo halla en Cristo al metafísico que, no sólo redime al ser humano, sino, también, le instruye sobre la constitución ontológica de su ser.