En ese escrito se hizo constar su desagrado al haberse ignorado durante la homilía las virtudes cristianas y humanas de quien demostró durante toda su vida, amor y entrega a la Patria.
[1] Durante su mandato municipal reorganizó los servicios administrativos del ayuntamiento Las Palmas de Gran Canaria y potenció las prestaciones a los vecinos en una época de cambios políticos y precariedad económica en los ayuntamientos.
Cobraron tal importancia que se llegó a discutir con ellas en asambleas, no sólo los problemas de los barrios, sino el propio presupuesto municipal.
El traslado de las oficinas municipales a su actual ubicación, en el antiguo Hotel Metropole, se acordó también durante su cargo como primer edil.
Tras unos años en los que la actividad política se redujo a su paso por el Partido del País Canario, Fernando Ortiz reanudó su labor política en 1990 cuando se afilió al PSOE.