Ferias de Ayerbe

Tuvo esta Villa privilegio del rey Felipe V para celebrar mercado los jueves de cada semana, en los que se comerció con abadejo, arroz, judías, aceite, alpargatas, especiería, soguería, jabón, etc.

Este mercado se pasó con los años al sábado y se dedicó casi por exclusivo al ganado porcino; desapareció a mitad del siglo XX a causa de una epidémia.

Las ferias tuvieron su reglamentación, muy estricta y amplia por cierto (para evitar que se cometieran abusos, fraudes o engaños), e igualmente tenían una serie de ventajas para quienes acudían a ellas, como la seguridad, la rebaja en algunos impuestos, la posibilidad del libre cambio, etc.

Esto último aconteció con los medios de transporte que empezaron a surgir entre los siglos XIX y XX.

Paralelamente también se ofertaban bailes así como gran variedad de diversiones y distracciones, tanto para las personas mayores como para la grey infantil.