Faro de Maspalomas

La vivienda, de planta rectangular, fue desarrollada a partir de una idea tradicional como es el patio canario, pero las cuatro fachadas del inmueble están socorridas por la moda ecléctica del periodo en que fue construido.

[1]​ Se encuentra totalmente automatizado y funciona mediante energía eléctrica convencional conectado a la red pública.

Sus esquinas y una cornisa que remata toda su parte superior, también hacen uso de la sillería para armonizar el conjunto.

Sobre la entrada al edificio encontramos un pequeño balcón en madera de tea y en el interior un patio sirve como distribuidor para dar acceso a todas las estancias y a la propia torre.

En ellas se encuentran las diferentes dependencias, almacenes y cuarto de que disponía el farero; así como un grupo electrógeno y las correspondientes baterías para garantizar el funcionamiento en caso de desconexión o fallo en la red eléctrica.

La silueta del faro y de las Dunas de Maspalomas constituyen un icono único que sirve para reconocer en todo el mundo la marca Maspalomas Costa Canaria como destino turístico singularizado.

También cuenta con productos contemporáneos del sector textil inspirados en técnicas de la artesanía tradicional.

Alzado del faro (1895).