Faro Evangelistas
En diciembre de 1892 el teniente Baldomero Pacheco Corbalán, al mando de la escampavía Cóndor, realizó el primer reconocimiento in situ a estas casi inabordables rocas para realizar posteriormente un informe detallado a sus Superiores sobre la factibilidad de erigir un Faro en dicho sector.El 25. de mayo del mismo año Slight junto al ingeniero Austriaco Luis Ragosa, inspeccionaron personalmente este Islote, teniendo como referencia el detallado Informe ya elaborado por el Teniente Pacheco.[3] De los seis peñones, Slight eligió el islote suroeste, por su mejor visibilidad desde el mar y superficie plana superior.La tarea era casi imposible por la agreste geografía de estos promontorios de piedra, cuyo violento oleaje sería capaz de salpicar hasta la base del faro a 50 metros sobre el nivel del mar, donde los vientos alcanzan los 150 nudos y la lluvia varía entre los 2 mil y 3 mil milímetros anuales.[4] Se le denomina coloquialmente como La piedra por su dotación, mote que se le impuso desde su funcionamiento, y desde la fecha de partida ya han fallecido 5 guardafaros chilenos de su dotación, ya sea por ahogamiento o enfermedades.