Familia Ovitz

Eran hijos de Shimson Eizik Ovitz (1868-1923), un respetado animador badchen, rabino ambulante y él mismo enano.

Aunque los Ovitz eran judíos observantes, consiguieron documentos que omitían el hecho y continuaron realizando sus giras hasta 1944.

Una vez en el campo de concentración, los Ovitz llamaron la atención del médico del campo alemán Josef Mengele[5]​ (conocido como el 'Ángel de la Muerte'), quien recopilaba curiosidades humanas para experimentos pseudocientíficos sobre la herencia.

Otros once prisioneros del mismo pueblo afirmaron ser sus parientes, y Mengele los mudó a todos en consecuencia.

Cuando llegaron, Mengele les hizo desnudarse mientras hablaba de sus propias ideas sobre la genética.

[5]​ Los Ovitz, como muchos otros reclusos del campo, fueron sometidos a diversas y dolorosas pruebas.

Los Ovitz también fueron testigos de cómo mataban y hervían a dos enanos recién llegados para que sus huesos pudieran exhibirse en un museo.

Mengele también los filmó; esta película no se encontró después de la guerra, y es posible que la guardara cuando huyó.

Los Ovitz viajaron a pie durante siete meses hasta su pueblo natal.