Los demás miembros de la familia imperial cumplen con sus obligaciones ceremoniales y sociales, pero no intervienen en asuntos gubernamentales.
que figura el primero en la línea de sucesión, y su consorte, los shinno (親王, shinnō?)
Los descendientes más lejanos en la línea de sucesión son ō (príncipes) o nyoō (princesas).
El clan imperial incluía líneas colaterales especialmente shinnōke (Casas de príncipes).
Ninguna de ellas se casaba o tenía hijos tras ascender al trono.
El gobierno del primer ministro Yoshida Shigeru se apresuró e improvisó con la legislación para que la ley de la casa imperial fuese conforme con la Constitución del Japón escrita por los estadounidenses que entró en vigor en mayo de 1947.
Hubo una potencial crisis de sucesión ya que no había nacido ningún varón en la familia imperial desde el nacimiento del príncipe Akishino en 1965.
El origen de este doble sentido se debe a una copia del sistema nobiliario chino.
Al contrario que en China, ō se utilizaba solamente para miembros de la familia imperial.
Históricamente, cualquier miembro varón de la familia imperial recibía el título de ō por defecto, que junto a shinnō (親王; literalmente familia-príncipe) y su equivalente femenino naishinnō (内親王; literalmente interno familia-príncipe) eran dos títulos especiales concedidos por el emperador.
También se redujo la Familia Imperial al eliminarse los títulos de ōke y shinnōke.
Pero este no tiene hijos varones, por lo que la línea de sucesión continuaría en su hermano Akishino.
El estatuto sobre las princesas en Japón sigue negando a las mujeres el acceso al trono, pero con esta reforma sus hijos varones sí podrían hacerlo.