Expansión territorial de Chile

Consistió básicamente en operaciones militares, no necesariamente coordinadas entre sí, siendo uno de los ejes centrales política del país.

No obstante, los chilotes resistieron la invasión y derrotaron a las tropas en el Combate de Agüi.

Este proyecto de una colonización magallánica había estado entre las preocupaciones en los primeros gobernantes independentistas.

Por otra parte, luego de que Argentina perdiera las islas Malvinas, se volvió una posibilidad cada vez más creíble el que el Estrecho fuera ocupado por una potencia europea, deseosa de controlar el paso entre el Pacífico y el Atlántico, que cobraba una importancia creciente gracias al desarrollo del barco de vapor.

Posteriormente se fundó Fuerte Bulnes y, unos años más tarde, la ciudad de Punta Arenas.

El gobernador de Magallanes, Óscar Viel y Toro por encargo del ministro Adolfo Ibáñez Gutiérrez fue el encargado de fundar el asentamiento, este solo duraría seis semanas luego del acuerdo diplomático entre este país y la Nación Argentina.

[2]​[3]​ También existió presencia de buques chilenos hasta el río Santa Cruz.

[4]​ En 1861 el presidente José Joaquín Pérez Mascayano inicia la ocupación de la Araucanía (denominada en los documentos oficiales chilenos como pacificación de la Araucanía), zona que comprende los terrenos ubicados entre el río Biobío, por el norte, y Toltén por el sur.

[cita requerida] Las reclamaciones territoriales chilenas sobre la Antártida se basan principalmente en consideraciones históricas, jurídicas y geográficas.

Mapa actual de Chile que incluye su plataforma continental y reclamación antártica.
Fuerte Bulnes, levantado en 1843.
Territorios ganados en la guerra del Pacífico (al norte de la provincia de Atacama).
El presidente Gabriel González durante la inauguración de la Base General Bernardo O'Higgins en la Antártica (1948).