En su ornamentación habitual figuran esvásticas, trisqueles, cruces, hélices, aspas, guerreros o representaciones funerarias prerromanas.
Esta estela forma parte del actual escudo de Cantabria y el significado del tetrasquel está relacionado con el culto lunar.
La estela de Barros es una estela discoide gigante, tipo que llama mucho la atención y que supone, precisamente por su tamaño, una de las mayores diferenciaciones con las estelas encontradas en otros lugares del norte de España.
Las estelas cántabras son el testimonio más importante de los pueblos cántabros prerromanos y uno de los signos más representativos de la Cantabria actual, y se siguieron utilizando en Cantabria durante la Edad Media e incluso durante el periodo Barroco, a semejanza de las antiguas, pero perdiendo en parte su forma discoide y sustituyéndose los motivos solares centrales por cruces.
[1] Las estelas discoideas medievales y modernas fueron también típicas de otras regiones del norte peninsular, encontrándose numerosos ejemplares, además de en Cantabria, en el País Vasco, y varios en Navarra.