Esto le permite al operador realizar dos funciones: El espectrofotómetro, en general, consta de dos dispositivos; un espectrómetro y un fotómetro.
El detector es el encargado de captar la radiación y, a su vez, dejarla en evidencia para su estudio posterior.
Esto reduce el tiempo de medida, y minimiza las partes móviles del equipo.
Se caracterizan por tener dos paredes correspondiente a los lados ópticos por donde cruza el haz de luz.
En 1940 estaban disponibles en el mercado varios espectrofotómetros, pero los primeros modelos no podían trabajar en el ultravioleta.
Este instrumento fue producido desde 1941 hasta 1976 con esencialmente el mismo diseño; más de 30 000 unidades fueron vendidas.