Escenas de fábulas (Biombo)

Durante la segunda mitad del siglo XIX, los movimientos historicistas, en los cuales se buscaba recuperar épocas pasadas así como sus expresiones, tuvieron un gran auge y muchos puntos de contacto con el movimiento romántico al considerarse que fueron una reacción a los cánones de las Academias de arte del siglo XVIII, donde principalmente predominaba el neoclásico.

Entre estos movimientos se encontraban el neobarroco y la recuperación de su última etapa, el revival del rococó,[2]​ el cual había producido a su vez el retorno a las formas de la arquitectura clásica.

Este se encuentra ricamente decorado con algunas esculturas que son una reinterpretación de las rocallas, motivos florales y vegetales, así como ornatos propios del rococó, en un tono azul y dorado.

[1]​ Al interior de cada una de las hojas, se encuentran lienzos en óleo sobre madera, en los cuales se encuentran representados algunas fábulas, es decir lecciones morales, los cuales eran temas recurrentes para su uso en espacios privados, incluyendo los salones para las damas,[1]​ aunado al hecho de que el biombo es un mueble que separaba los espacios públicos y privados.

Las fábulas que se encuentran representadas han sido atribuidas a Esopo, las cuales fueron recuperadas y transcritas en el siglo XVII por Jean de La Fontaine.