Ernie Pyle

Cuando tenía 18 años, se unió como voluntario a la Armada de los Estados Unidos y participó en la Primera Guerra Mundial, pero solo durante tres meses.

En Washington conoció a su futura esposa, Geraldine "Jerry" Siebolds y se casaron en 1925.

Viajaron más de 9000 millas antes que Ernie volviera a su trabajo en el The Washington Daily News.

Al día siguiente, después de que supuestamente se neutralizó la oposición enemiga local, Pyle viajaba en un jeep con el Tte.

"Un poco más tarde, Pyle y yo nos levantamos para mirar alrededor", informó Coolidge.

"Otra ráfaga golpeó el camino sobre nuestras cabezas... Miré a Ernie y vi que había sido alcanzado".

La ex primera dama Eleanor Roosevelt, que citaba con frecuencia los despachos de guerra de Pyle en la columna de su periódico, "My Day", le rindió homenaje en su columna el día después de su muerte: "Nunca olvidaré cuánto disfruté al encontrarme con él aquí en la Casa Blanca el año pasado", escribió, "y cuánto admiré a este hombre frágil y modesto que podía soportar las dificultades porque amaba su trabajo y a nuestros hombres".

En 1949, sus restos fueron algunos de los primeros en ser enterrados en el Cementerio Conmemorativo Nacional del Pacífico en Honolulu, Oahu, Hawái.

Imprimió sus historias con su estilo simple y directo, su perspectiva única sobre los acontecimientos le dio al mundo una cara más humana a los horrores de guerra.

Su obra periodística, no obstante, quedó recogida en cuatro libros sobre la Segunda Guerra Mundial: en Inglaterra ("Ernie Pyle in England", 1941), en África ("Here is your war", 1943), en Europa ("Brave Men", 1944) y en el Pacífico ("Last Chapter", 1946).

Memorial en honor de Ernest Pyle en Okinawa .
Pyle comparte cigarrillos con soldados en Okinawa