Fue construida por el Cabildo de Tenerife a finales del siglo XVII y sirvió durante muchos años como capilla a la guarnición del castillo de San Juan que se encuentra en las inmediaciones.
Con el paso del tiempo la ermita se fue deteriorando hasta tal punto, que fue necesario cerrarla al público por motivos de seguridad.
En la actualidad todos los días 8 de cada mes se realizan eucaristías especiales en honor a la Santísima Virgen de Regla, igualmente la ermita permanece abierta todos los domingos del año por la mañana.
La ofrenda a la imagen consiste en la entrega de flores y frutas.
Los agentes de Protección Civil desplazados desde distintos municipios, también están presentes honrando a su patrona.