Enrique Suárez de Mendoza y Figueroa fue un escritor español del siglo XVII.
Van Praag la valora así: Sin duda su modelo es el Miguel de Cervantes del Persiles, pero no es una mala imitación como los que no la han leído suelen creer, sino una obra consistente y entre los mejores exponentes de su género.
Como es lógico en él, narra las aventuras de dos amantes separados que al fin logran unirse felizmente en matrimonio.
La protagonista se disfraza de hombre y despierta antinaturalmente pasiones entre otras mujeres; este juego con la homosexualidad es bastante común en la obra.
El argumento respeta rigurosamente la verosimilitud y utiliza hábilmente con la intriga como si fuese una prematura novela policiaca.