De tendencia vanguardista, perteneció a la Generación del 30 (Perú), junto con Martín Adán, Emilio Adolfo Westphalen, César Moro, Carlos Oquendo de Amat y Ricardo Peña Barrenechea (su hermano).
Cursó sus estudios escolares en el Colegio Sagrados Corazones Recoleta y apenas egresado, ganó un concurso en los juegos florales convocado por la Federación de Estudiantes del Perú, a mérito de su libro El aroma en la sombra (1924).
Por entonces abandonó la docencia universitaria y estuvo a punto de ser retirado del servicio diplomático.
Obtenida su jubilación, residió en París durante muchos años, hasta que retornó a Lima en 1982, donde falleció en 1988.
Gira el cielo en los ojos del mago y los horóscopos de las más remotas lejanías.