Enrique Pérez Farrás

Al término de la guerra civil española se exilió en México.

Por esto fue juzgado en un consejo de guerra y condenado a muerte junto a otros oficiales como Federico Escofet,[5]​ pero la pena le fue conmutada por el presidente de la República Alcalá Zamora por la de reclusión perpetua.

[6]​ La victoria del Frente Popular en las elecciones de febrero de 1936 hizo que fuera indultado y liberado,[7]​ siendo readmitido en el Ejército.

[12]​ Al acabar la guerra civil se exilió a México.

Ocupó un cargo elevado en un banco dirigido por exiliados catalanes.