Se establecerá en Roma unos años después, comenzando sus trabajos en diversos campos de la arqueología romana: topografía, filología, anforología y epigrafía latina.
Rodríguez Almeida ubica e identifica diversos monumentos de la Roma Imperial, de los que se había perdido el rastro, en ellos el Lacus Orphei.
Ha impartido clases en universidades italianas (Roma, Bari, Viterbo, Perugia) y españolas (Madrid, Barcelona, Santander, Sevilla), francesas (Aix-en-Provence, Marsella), suizas (Berna, Basilea, Lausana), americanas (UCLA, UC Irvine, Stanford, Berkeley, Pennsylvania), etc.
Era miembro correspondiente del Instituto Arqueológico Alemán y de otras instituciones.
En 2001 la Universidad de Sevilla lo nombró doctor honoris causa.