El embajador español es nombrado en Consejo de Ministros.
Con la revolución de 1953 que derrocó al rey-niño Fuad II, se estableció una república.
La actual constitución refrenda los poderes presidenciales al ser este el representante del Estado y recibir la acreditación de los embajadores extranjeros en el país (artículo 151).
La Embajada española en Egipto, en el pasado, llegó a tener una demarcación importante, pero actualmente carece de ella.
Así, estuvo acreditada también en estos países: Embajador/Nuncio apostólico Enviado extraordinario y ministro plenipotenciario Ministro Residente Cónsul Encargado de Negocios