Elecciones generales de Trinidad y Tobago de 1991

El resultado estableció que el PNM, bajo el liderazgo de Patrick Manning, recuperara el gobierno con el 45.02% del voto popular y una mayoría absoluta de 21 escaños, habiendo recibido tan solo 3 en la elección anterior.

Habiendo llegado al poder con una abrumadora aprobación pública, el gobierno de Robinson rápidamente se desgastó, principalmente debido a sus políticas económicas de austeridad fiscal y ajuste estructural, recomendadas por el Fondo Monetario Internacional.

Este nuevo partido, de carácter socialista y dominado por la población indotrinitense, comenzó rápidamente a crecer en adeptos e influencia política.

Esto, sumado al descontento económico, destruyó por completo la legitimidad del gobierno y sus esperanzas de lograr una reelección.

La constitución trinitense no fija realmente un período específico para la duración del mandato de los representantes electos, y la fecha de los comicios queda a discreción del primer ministro en acuerdo con el presidente.

Sin embargo, desde la instauración del sufragio universal en el país, por convención el plazo de tiempo entre una elección y otra no suele ser mayor a cinco años.

Hubo cinco candidatos independientes en cinco distintas circunscripciones (Fyzabad, Naparima, Puerto España Norte, Puerto España Sur, y Tobago Este), sin que ningún distrito se viera disputado por más de uno.