Fue su último trabajo de ficción importante publicado en vida y posiblemente su obra más famosa.Santiago es un pescador de avanzada edad, que lleva 84 días sin conseguir pescar nada.Un buen día por la mañana, decide salir solo al mar, donde por fin, un enorme marlín (pez vela similar al pez espada) pica el anzuelo no sin dar batalla antes de ser capturado definitivamente.La lucha con el pez dura tres días, en los que Santiago recuerda su vida pasada.Al rato, el pez espada del viejo es nuevamente atacado por un tiburón que logra quitarle un trozo más de carne.Santiago, derrotado, convencido ahora de su mala suerte, increpa a los tiburones por la forma en que han matado sus sueños.Agotado, hambriento y herido se dirige inmediatamente a su pequeña cabaña a "descansar" (no se sabía si estaba dormido o había fallecido), mientras carga en sus hombros el pesado mástil de su bote.Por una parte, el estado físico del viejo y las reacciones tanto de Santiago como de Manolín, te permiten inferir que por su tristeza y actos desesperados, ambos reconocen el posible final del viejo.Unos cuantos críticos sostienen que, aunque nunca se alude en el libro específicamente a su nacionalidad, Hemingway deja suficientes pistas para deducir que el protagonista es un canario emigrado a Cuba en su juventud (por ejemplo, al hablar de sus recuerdos de la costa africana) y, debido a ello, argumentan que la lucha contra el pez es también un método para establecerse en la sociedad cubana.Quizás la afirmación más memorable es la respuesta de Waldmeir a la pregunta: ¿Cuál es el mensaje del libro?No hay traducción para esta palabra y tal vez sea sólo un ruido como el que podría hacer un hombre, involuntariamente, al sentir que el clavo atraviesa sus manos y se clava en la madera.[15] Al yuxtaponer esta novela con las obras anteriores de Hemingway, Weeks sostiene: La diferencia, sin embargo, en la eficacia con la que Hemingway emplea este recurso característico en su mejor obra y en El viejo y el mar es esclarecedora.