Kitiara Uth Matar, la hermanastra de los gemelos, Caramon y Raistlin, se ausenta de la reunión, enviando una nota misteriosa en la que expone que «su nuevo dueño la mantiene ocupada».
A todos llama la atención el siniestro aspecto de Raistlin, que se ha convertido en un Túnica Roja, magos a los cuales no les convence la postura radical de la "Luz" (Túnica Blanca), pero que tampoco creen plenamente en la "Oscuridad" (Túnica Negra), así que se quedan en una postura neutral, bajo la protección de la luna Lunitari.
Después de un largo viaje volando sobre pegasos y de varios encuentros con las fuerzas oscuras, el grupo llega a Xak Tsaroth y es atacado por el dragón negro Khisanth.
Una vez adentrados en las profundidades de Xak Tsaroth, el grupo se encuentra con algunos enanos gully.
De esta forma, Bupu les guía hasta la guarida de Khisanth, donde van a robar los discos y un libro mágico, mientras Raistlin distrae al dragón, pero el plan sale mal y el dragón captura a Raistlin.
Cuando el resto del grupo llega a la guarida ven al dragón que les espera con Raistlin como prisionero.
Khisanth pide a Goldmoon que le entregue la Vara pero ésta lo mata con el poder santo de la misma.
El grupo parte de vuelta hacia Solace, y Bupu, que se ha enamorado perdidamente de Raistlin, le regala a éste un libro mágico muy antiguo que es la Obra completa del archimago Fistandantilus, el cual tiene un pacto oscuro con Raistlin y a veces le da su poder.
El grupo va hacia Qualinesti, la ciudad de los elfos, que está siendo abandonada por sus habitantes.
Durante su estancia en Qualinesti la hija del Orador, Laurana Kanan, besa a Tanis y le pregunta si se quiere casar con ella, como habían prometido tiempo atrás, pero este le dice que está enamorado de ella y de otra mujer, Kitiara Uth Matar.
Durante el camino encuentran la tumba del primer gobernante elfo, Kith-Kanan y se enfrentan a una babosa gigante que es matada por Laurana, que aparece por sorpresa y se une también al grupo.
Durante todo eso Eben, que había traicionado al grupo intentó entregar a Berem, el humano eterno, a Verminaard pero es sepultado por unas rocas que habían lanzado Fizban y Tasslehoff.
La adaptación del guion fue llevada a cabo por George Strayton con la asistencia creativa de los autores, Margaret Weis y Tracy Hickman.