El hombre que se quiso matar es una película española de la productora Coral P.C,[1] considerada una comedia negra, dirigida por Rafael Gil[1] sobre la novela homónima de Wenceslao Fernández Flórez.
[1] El mismo director quiso crear en color[3] una versión de una de película con el mismo título que ya había previamente llevado la historia al cine en 1942.
[4] Federico Solá (Tony Leblanc) es un hombre maltratado por la vida.
[1] Decide entonces acabar con todo y tirarse por el acueducto de Segovia.
Son varios los intentos infructuosos de acabar con su propia vida, hasta que un "caradura", interpretado por Alfonso del Real, se da cuenta de que su condición de suicida confeso lo sitúa en una situación privilegiada para sacar provecho, es decir, que le hace ver que quererse suicidar le hace más valiente y mejor que los demás.