Sin embargo no tiene una continuidad, ni supone una evolución significativa en la trama o personajes, con respecto a los temas tratados en el resto de la saga.
Mientras se van acomodando en el lugar donde van a efectuar el rodaje escuchan la noticia de que se está produciendo una inexplicable serie de disturbios y asesinatos masivos.
Dos los de los estudiantes, Ridley (Philip Riccio) y Francine (Megan Park), deciden abandonar al grupo.
Mientras tanto el director del proyecto, Jason Creed (Joshua Close), localiza a su novia Debra, la narradora que apareció al comienzo de la película.
Sus amigos lo impiden y la llevan a un hospital, momento en que el grupo se encuentra en su interior a los zombis reanimados y se percatan de la gravedad de la situación.
Gordo Thorsen (Chris Violette) es mordido por un zombi y aunque su novia Tracy (Amy Lalonde) prohíbe a los demás que le disparen, más tarde se ve obligada a dispararle ella misma.
Los supervivientes restantes se enconden en lugares cerrados y aparentemente seguros en el interior de la casa, menos Jason, que dejó al grupo para seguir grabando escenas.
[4] Por ello, a pesar de la buena acogida de la anterior película, Land of the Dead (2005) producida por Universal, esta película es más modesta en presupuesto (2.750.000$) y recaudación (4.750.000$) al tener más marcado componente independiente.
En Diary of the Dead se satiriza el mundo y una sociedad enferma, sobrecargada de información, cámaras y pantallas, cuyos seres humanos, obsesionados, son capaces de abandonar a su suerte a un moribundo si logran con ello capturar las mejores imágenes.
[6] El reparto cuenta con un elenco de jóvenes actores y actrices, acordes al estilo de la película "cámara en mano" y proyecto estudiantil que se muestra en pantalla.
No obstante figuran algunos cameos, como el del propio director, encarnando a un jefe de policía y participaciones estelares como las voces de directores como Quentin Tarantino o Wes Craven.
Sin embargo Banks también aparece en Land of the Dead, dirigida por Romero, interpretando a uno de los zombis principales: el carnicero.
Es un recurso similar al mostrado en películas como Cloverfield (Matt Reeves, 2008), REC (Jaume Balagueró y Paco Plaza, 2007) o The Blair Witch Project (Daniel Myrick y Eduardo Sánchez, 1999).
Aunque las compañías productoras autorizaron la secuela de Diary of the Dead, debido a su positva recepción comercial, Romero dijo que era imposible hacerlo ya que necesitarían a los mismos actores.