El adolescente de Tamuín

Representa a un joven huasteca desnudo que en el cuerpo tiene esgrafiado motivos artísticos que pudieran representar tatuajes o pinturas corporales en el costado derecho de su cuerpo, así como la nuca, el cuello, las muñecas y los hombros.

Tal postura coincide con otras esculturas huastecas y con la descripción de las crónicas del siglo XVI de esa misma civilización: forma apuntada de la cabeza debido a la deformación craneal artificial, muñequeras, grandes orejeras, dientes afilados y desnudez.

[1]​ En la espalda tiene colgado con una banda a un niño, el cual presenta también deformación craneal y orejeras.

[6]​ En dicha zona se realizaban obras de una casa para el militar Manuel Lárraga, las cuales fueron detenidas por los hallazgos.

Según otra versión, Lárraga la habría descubierto y la regaló a su amigo Blas E. Rodríguez, un abogado residente en Tampico y quien la habría vendido por conducto de Joaquín Meade al Museo Nacional de México por diez mil pesos.