Adán la encuentra y la toma como suya, pero sin darse cuenta del billete que llevaba escondido.
Adán se encuentra constantemente con un ventrílocuo alcohólico venido a menos (Luis Aguilar) y su muñeco Titino.
El mudo está, al mismo tiempo, incomodado pero fascinado por Titino, y su aparente habilidad para hablar solo.
En la zona roja, Adán hace amistad con una prostituta (Alida Valli), a quien le pide un hijo.
Ella intenta engañarlo tratando de "guardárselo", pero Adán se da cuenta y huye del lugar.
Los demás pepenadores se enteran de que Adán tiene un billete grande, y deciden quitárselo.
Le da ropa formal al mudo para que no sospechen de él por su pinta de vagabundo pero despiertan sospechas en el banco, y Adán decide huir con su billete, para evitar problemas.
En cualquier caso, Adán sufriría las consecuencias, al no poder demostrar la procedencia del billete.
Tras vagar por la ciudad y fantasear lo que hará con el billete (comprar la Torre Latinoamericana, por ejemplo), llega a un orfanatorio, en donde se entrevista con la directora, armando una pantomima en donde dice que quiere adoptar a un niño.
Al amanecer, Adán, ilusionado, saca a Titino del estuche, "dándole cuerda" y esperando que hable.