[4][5] El sitio está emplazado en la sabana central del Petén en un área bien drenada no sujeta a inundaciones estacionales.
Inclusive, algunas casas habían sido edificadas en las inmediaciones de la acrópolis pero fueron posteriormente relocalizadas durante la guerra civil en Guatemala a finales del siglo XX.
[10] Los monumentos esculpidos de la ciudad indican que ésta fue lo suficientemente importante como para poseer su propio glifo-emblema.
[9] Todos los textos jeroglíficos esculpidos en los monumentos de El Chal datan del siglo VIII d. C. y se encuentran muy erosionados.
[11] Esto ha sido evidenciado por la intensa actividad constructiva conducida entonces y por la erección de nuevos monumentos.
[5] Las plazas y la mayoría de las estructuras residenciales fueron construidas a nivel del terreno original mientras que la acrópolis se edificó sobre una colina de piedra caliza y sólo algunos grupos residenciales fueron construidos sobre plataformas artificiales.
[17] El complejo ritual de El Chal fue localizado a considerable distancia hacia el noreste del centro cívico y fue construido posiblemente en el periodo preclásico.
[3] Los arqueólogos han mapeado 268 estructuras agrupadas en 53 conjuntos formando alrededor de 68 patios en el núcleo del yacimiento.
[18] Las estructuras residenciales se concentraron en el área que rodea el centro ceremonial, especialmente hacia el norte y el oeste, cerca del estanque artificial de agua.
[18] Las residencias tendían a ser mayores en la medida en que estaban situadas más cerca del estanque.
Estas áreas residenciales de El Chal son extensas y los investigadores las han dividido en cuatro sectores.