El último tren a Katanga

Tras una serie de contratiempos logran llegar hasta la explotación minera con los Simbas a escasos kilómetros.

Curry, en compañía del cabo Kataki (Bloke Modisani), junta todo el combustible que puede para dirigirse en un todo terreno hacia una estación de tren con el que enviar un mensaje por telégrafo solicitando envío de combustible por vía aérea.

Ese es el momento que aprovecha Henlein para asesinar al sargento Ruffo y apoderarse de los diamantes.

Curry, lleno de ira, le persigue logrando darle caza y asesinarlo a sangre fría.

Una historia ambientada en el Congo empezó a interesar al director Jack Cardiff tras haber viajado al país y conocer a varios corresponsales cubriendo los conflictos tras la independencia de la antigua colonia belga.

[3]​ Los exteriores de la película, entre los que se incluyen los planos del tren a vapor, fueron rodados en Jamaica.

[5]​ El director Quentin Tarantino también ha visto varias veces la película y le ha influido en su obra cinematográfica.