El éxodo ( :ἔξοδος, éxodos ‘salida’, hebreo:, יציאת מצרים , Yetsi'at Mitzrayim , hebreo:jəsʕijaθ misʕɾajim Y'ṣiʾath Miṣrayim ‘[la] salida [de] Egipto’) es un relato bíblico sobre la salida de los israelitas del antiguo Egipto (Biblia hebrea y el Antiguo Testamento).
[1] En forma estricta, el término hace referencia únicamente a la salida de Egipto descrita en el Libro del éxodo; en forma más amplia, también incluye la recepción de las leyes y los viajes por tierra entre Egipto y Canaán descritos en los libros del Levítico, Números y el Deuteronomio.
El Libro del éxodo relata cómo Dios por medio de Moisés guía a los israelitas en su salida de Egipto y a través de las tierras salvajes de la península del Sinaí donde se encuentra el monte Sinaí, donde Dios se manifiesta y da personalmente al pueblo su Ley eterna, escrita con su propia mano estableciendo así una alianza con ellos, donde ellos deben guardar su torah (ley, instrucción), y a cambio él será su Dios y les dará la tierra de Canaán.
El Levítico es un registro de las leyes ceremoniales que Dios le enseñó a Moisés serían importantes hasta que él viniera a la tierra.
En Números se cuenta cómo los israelitas, guiados por su Dios, viajan a través del Sinaí hacia Canaán, pero cuando diez de los doce espías les informan que las tierras están infestadas con gigantes ellos se niegan a continuar olvidando una vez más lo maravilloso que Dios ha sido con ellos, Dios entonces los condena a permanecer en el desierto hasta que la generación que dejó Egipto haya fallecido, menos dos hombres fieles: Josué y Caleb.