Esto permitió a los persas rodear y derrotar al pequeño grupo de defensores espartanos, del cual solo sobrevivieron dos.
Efialtes esperaba ser recompensado por los persas, pero terminó por no obtener nada cuando estos fueron derrotados en la subsiguiente batalla de Salamina.
Efialtes huyó entonces a Tesalia, con una oferta de recompensa pendiendo sobre su cabeza.
[3] Sin embargo, tanto en la película de 2007, 300, como en el cómic del mismo nombre, Efialtes es representado como un jorobado deforme al que alejaron de Esparta al nacer para no verse muerto por su deformidad.
Profundamente dolido, Efialtes termina traicionando a Leónidas cuando Jerjes le ofrece el respeto y la aceptación que jamás recibió por parte de los espartanos.