Escribió varios libros sobre la intrusión de la cultura del consumo en el entorno natural estadounidense.
Desde joven despertó como un naturalista en potencia, y también como un ecologista, siendo ya un adolescente enfadado por las injerencias humanas en los Apalaches.
Entonces recorre casi todo el oeste de Norteamérica, descubre su mundo natural y sobrenatural, la cultura india.
Llevaba la vida típica del hobo -trabajador ocasional vagabundo americano-, llena de aventuras e incidentes, como su detención en Flagstaff (Arizona), por vagancia, que es rememorada en su novela La banda de la tenaza.
En esos años vive el final de la guerra mundial sirviendo en el ejército en Italia.