En un principio, el DC-7 era un encargo que Pan American World Airways hizo a Douglas en 1945 para construir una versión civil del transporte militar C-74 Globemaster, sin embargo el proyecto sería cancelado poco tiempo después.
American Airlines retomó el nombre cuando solicitó una versión de mayor alcance del DC-6 para sus servicios transcontinentales.
El fuselaje, que ya había sido alargado en 1 metro respecto del DC-6, contaba con un suplemento que daba al DC-7C una longitud total de 34,21 m. Pan Am utilizó DC-7C en sus primeros vuelos Nueva York-Londres sin escalas, forzando a la compañía británica BOAC a hacerse con algunas unidades del modelo, incluso antes de recibir los Bristol Britannia ya solicitados.
[3] Desde 1959, Douglas estuvo transformando DC-7A y DC-7C en cargueros DC-7F, operación que permitía alargar la vida útil de aparatos que ya habían operado como aviones de pasajeros.
Debido a sus problemas de motores, el DC-7 no alcanzó la longevidad del DC-6, que todavía es utilizado por algunos operadores comerciales.