Después obtuvo su primer papel protagonista en la cinta Il piccolo mozzo, rodada ese mismo año.
En esta última compañía interpretó diversas películas, siendo particularmente apreciada su actuación en Demonietto (1917), cinta que protagonizó acompañando a Alberto Collo, actor junto al cual actuó en otras varias ocasiones.
La década de 1920 fue menos satisfactoria para la actriz, aunque obtuvo algunos éxitos como La rosa di Fortunio (1922), Jolly, clown da circo (1923) y La casa dei pulcini (1924), donde se expresa al máximo su talento.
En 1924 también interpretó Maciste e il nipote d'America, película en la que acompañaba a Bartolomeo Pagano.
De vuelta a Italia en los años treinta, en el período del cine sonoro rodó únicamente dos películas, L'ultima avventura (1932) y Cento di questi giorni (1933), retirándose después a su vida privada.