Sus padres fueron el oidor Pedro Bravo del Ribero y Correa y Petronila de Zavala y Vásquez de Velasco, hija de José de Zavala y Esquivel, VI señor de Casa Zavala.
Realizó sus estudios en el Real Colegio de San Felipe y San Marcos y en la Universidad de San Marcos, de la que se graduó de doctor en Leyes.
Durante el virreinato ejerció los cargos de subdelegado del Partido de Canta (1796-1806), regidor perpetuo del Ayuntamiento (1797-1806), contador del Tribunal de Amortización (1807), oidor (1814-1820) y alcalde del Crimen (1805-1821) de la Real Audiencia de Lima.
En 1808, fue nombrado asesor general y auditor de Guerra del Perú, pero el Consejo de Regencia lo desconoció por lo que, en 1810, pidió su reconocimiento ante el Supremo Consejo de Guerra ejerciendo el cargo de 1814 a 1820.
En 1821, al proclamarse la Independencia del Perú, como otros miembros de la nobleza, dejó sus cargos y propiedades y se exilió a España.