Proceso de Reorganización Nacional
[35][13][36] Para entonces, la Argentina era el único país del Cono Sur que mantenía un régimen democrático, en tanto que todos los países vecinos estaban gobernados por dictaduras militares (Banzer en Bolivia, Geisel en Brasil, Pinochet en Chile, Stroessner en Paraguay y Bordaberry en Uruguay), sostenidas por Estados Unidos en el contexto de la doctrina de la seguridad nacional.[41] En noviembre, el Partido Justicialista expulsó al gobernador antiverticalista Calabró y, en diciembre, la presidenta elaboró un decreto para intervenir la provincia de Buenos Aires.De este modo, en aquella reunión entre la presidenta y los tres comandantes, quedó definida la suerte del Gobierno constitucional.La primera Junta Militar se compuso por los comandantes golpistas Jorge Rafael Videla (Ejército), Emilio Eduardo Massera (Armada) y Orlando Ramón Agosti (Fuerza Aérea).En el cargo correspondiente al Ejército, Videla fue reemplazado por Roberto Viola, Leopoldo Fortunato Galtieri y Cristino Nicolaides.En el cargo de la Marina, Massera fue reempalzado por Armando Lambruschini, Jorge Isaac Anaya y Rubén Oscar Franco.En el cargo correspondiente a la Aeronáutica, Agosti fue sucedido por Omar Domingo Rubens Graffigna, Basilio Lami Dozo y Augusto Hughes.Cuatro fueron las principales normas supraconstitucionales establecidas: Los presidentes tuvieron sus respectivos ministros: Las empresas y grupos civiles que participaron en la organización del golpe se instalaron principalmente en el Ministerio de Economía, que se le entregó al Consejo Empresario Argentino asumiendo su presidente, el empresario José Alfredo Martínez de Hoz, como ministro.El esquema del poder dictatorial se completó con la designación de gobernadores en cada provincia e intendentes en las ciudades.En esta entrevista, Hayek se definió como enemigo del estado de bienestar y la justicia social.[109] Sin embargo, esta la supuesta simpatía hacia las ideas del economista chocó contra sus postulados: un gasto público adecuado y una emisión monetaria que no debería existir.Para 1980 la producción industrial había reducido un 10% su aporte al PBI, y en algunas ramas como la textil, la caída superó el 15%.Durante esa época compra Fiat, esta venta terminó siendo un acuerdo para llevar adelante el cierre de plantas y despidos.La acción realizada a instancias del gobernante boliviano tenía como fin recuperar al Banco Central de Bolivia.[141] Durante la dictadura militar se tejieron fuertes lazos con Estados Unidos, convertido en el principal apoyo diplomático y económico de la misma.[144][145] Aquella asonada instaló la «narcodictadura» de Luis García Meza, que asesinó, ese mismo día, al dirigente socialista Marcelo Quiroga Santa Cruz, entre otras víctimas y desaparecidos.Ninguno de los dictadores argentinos dio solución al conflicto, desatado con el desconocimiento del laudo arbitral.Recién en 1984, el presidente Raúl Alfonsín, elegido democráticamente en 1983, reconoció lo resuelto por la mediación del papa Juan Pablo II, poniendo fin así al conflicto con Chile.Las disputas internas de los militares incidieron en esto, y el primer presidente del comité fue fusilado, según se sospecha, por su sucesor.[154] Así mismo, diferentes grupos empresariales ligados a la dictadura fueron beneficiados con contratos estatales opacos, entre ellos: Techint, Siderar, Socma, Papel Prensa, Loma Negra, Ledesma, Molinos, Bunge & Born, Editorial Atlántida, La Nueva Provincia, Dalminé- Siderca o La Veloz del Norte.[157] Algunas de las personalidades incluidas en las listas negras fueron María Elena Walsh, Luis Brandoni, Mercedes Sosa, Julio Cortazar, Pino Solanas, Héctor Alterio, Marilina Ross, Alfredo Alcón, Norma Aleandro, Norman Brisky, Jaime Dávalos, Florencio Escardó, Leonardo Favio, Hugo Gambini, Griselda Gambaro, Eva Giberti, Horacio Guaraní, Nacha Guevara, César Isella, Noé Jitrik, Lidia Lamaison Víctor Laplace, Federico Luppi, Julio Marbiz, Hugo Midón, Bárbara Mujica, Lautaro Murúa, Haydee Padilla, Sixto Pondal Ríos, Osvaldo Pugliese, Jorge Abelardo Ramos, Dalmiro Sáenz, Gregorio Selser, Atilio Stampone, David Stivel, Armando Tejada Gómez, Jacobo Timerman, David Viñas, Atahualpa Yupanqui, Carlos Alonso, Víctor Heredia, Rodolfo Kuhn, Jaime Kogan, Virginia Lago, Hamlet Lima Quintana, Cipe Lincovsky, Pedro Orgambide, Luis Politti, Juan Carlos Gené, Joan Manuel Serrat, etc.[158] La dictadura llevó a cabo una sistemática labor de censura, en la cual se quemaron cientos de miles de libros.[Enrique] Medina es, quizás, uno de los autores más sistemáticamente perseguidos por la censura, durante la dictadura e incluso antes, según Invernizzi y Gociol.La forma de vestirse, peinarse y las expresiones con mensajes sociales, poéticos o políticos se transformaron en un código común del rock argentino que influenció a casi toda la clase media.Con ellos, muchos artistas que estaban exiliados, como Litto Nebbia, León Gieco o Miguel Abuelo comenzaron a reconstruir el tejido de la cultura del rock en Argentina.Los directores y productores españoles, enterados de la censura previa, se negaron a enviar sus películas, lo que motivó la postergación sine die del evento.Entre algunos casos paradigmáticos se prohibió la enseñanza de la matemática moderna, o los temas musicales en los que Carlos Gardel era acompañado solo por guitarras.Grupos de censores marcaban con una cruz los temas musicales que no podían ser transmitidos por las emisoras radiales.En 1977 hubo un pronunciamiento conjunto contra la política económica que personificaba José Alfredo Martínez de Hoz, y en 1978 por la Paz con Chile.Estos hechos no fueron “espontáneos”, sino organizados, producto de la marcha acordada en decenas de comités conformados con reclamos y banderas propias en colegios, universidades, barrios, que fueron los mismos que concurrieron a repudiar a la cúpula militar cuando se dio su derrota y rendición.Se los enjuició por los mismos tribunales que pueden enjuiciar a cualquier ciudadano, aplicando el Código Penal vigente en la república desde 1922.