[1] Los países con mayor cantidad de tibetanos per cápita son India, Nepal y Bután, pero hay también tibetanos en Europa, América y el Sudeste Asiático siendo Taiwán uno de los destinos predilectos recientemente.
[2] Los primeros tibetanos que dejaron su tierra masivamente en tiempos modernos lo hicieron en los años 50 tras la anexión del Reino del Tíbet a la República Popular de China en 1950 en que se calcula que unos 80.000 tibetanos emigraron a países vecinos, especialmente India, entre ellos el líder político y religioso tibetano el Dalái Lama, quien se ubicó en Dharamsala, ciudad india que es hoy día uno de los principales asentamientos tibetanos fuera de Tíbet.
El pueblo tibetano poseyó un extenso y aguerrido imperio que dominó varias regiones de los Himalayas consolidándose como una potencia local.
[7][8] El gobierno tibetano en el exilio ha sostenido charlas oficiales con China para lograr acuerdos, aunque ninguno se ha concretado formalmente, también sostiene relaciones estrechas con Taiwán.
[10] Aunque aquellos tibetanos radicados en zonas del norte, como Ladaj y Sikkim, que tienen grandes similitudes culturales y climáticas con Tíbet tienden mejor a la adaptación, al igual que los tibetanos en Bután.