Dados de rol

Un dado es por definición un objeto concebido para que al ser lanzado y rodado, uno de sus posibles resultados, el que queda en posición superior (o en la arista inferior en algunos dados de cuatro) una vez que el dado se ha inmovilizado, indique un resultado.

Los objetos más apropiados para ser utilizados como dados serán pues aquellos a los que se les haya dado la forma de poliedros, aunque desde la antigüedad también se han usado huesecillos de animales.

De los seis dados que mayoritariamente se utilizan en los juegos de rol, cinco tienen la forma de los llamados cinco sólidos platónicos, los únicos cinco poliedros en ser llamados «perfectos» por ser los únicos perfectamente regulares.

Estos pueden ser sin embargo simulados mediante la simple división de resultados.

Para efectuar una tirada de dado de dos se puede utilizar una moneda, echando a suertes un resultado de «cara o cruz» en el que «cruz» corresponde por ejemplo a 1 y «cara» corresponde a 2, o viceversa.

A los modificadores positivos también se les suele llamar bonus o «bonificadores» del mismo modo que a los modificadores negativos también se les llama malus o «penalizadores».

Una notación de este tipo sería la siguiente: 3D+2, en cuya lectura («tres dados más dos») se sobreentiende que la letra «D» sólo se refiere a dados de seis caras.

En lo que se refiere a los cinco dados basados en los cinco sólidos platónicos es muy posible que estas cinco formas perfectas, que recibían por ejemplo una adoración particular por parte de las antiguas sectas pitagóricas de los siglos V y IV antes de Cristo, fuesen usadas ya desde la antigüedad para fabricar dados que tuviesen tales formas, pues su perfecta regularidad es ideal para obtener una rodadura que permita la aleatoriedad objetiva y equitable que se espera de un dado.

La resolución de las acciones se lleva a cabo obteniendo en cada tirada un resultado igual o superior a un valor expresado en puntos de dificultad, dificultad determinada por el director de juego siguiendo lo estipulado por la reglas del juego.

Cuantos más dados tiene un personaje en una habilidad mayores posibilidades tiene su jugador de superar las dificultades que se presentan al realizar acciones que requieran dicha habilidad.

Por ejemplo un jugador de Star Wars quiere reparar su nave espacial y dispone de cuatro dados más un punto (4D+1) en la habilidad «reparar naves espaciales» (4D+1 se lee «cuatro dados más uno» en la notación abreviada del sistema D6).

Para que a efectos de juego la nave espacial vuelva a estar en condiciones normales el resultado de la tirada del jugador debe ser igual o superior a la dificultad que el director de juego había establecido: 15.

Según este sistema los personajes tienen modificadores que expresan sus habilidades.

Por ejemplo un jugador tiene un +5 en la habilidad de leer y está intentando descifrar un pergamino antiguo.

Bautizado en inglés con la patente Zocchihedron (o «zocchiedro» en castellano) fue inventado y lanzado al mercado en 1985 por el estadounidense Lou Zocchi, pero no ha conseguido venderse con éxito porque su rodadura tarda demasiado tiempo en detenerse y porque muchas veces la lectura del resultado de su tirada es confusa o ambigua.

Set completo de dados de rol. Comenzando por abajo y en sentido contrario a las agujas del reloj: dado de cuatro caras, dado de seis, dado de ocho, dado de diez, dado de doce y dado de veinte.
Los dados de rol pueden ser de plástico o de madera, opacos o transparentes, de colores lisos o colores irisados etc.
Estructura de un dado de 20
Estructura de algunos dados de 4
El zocchiedro , el dado de cien caras más popular.
Si se determina previamente cual marca las decenas y cual las unidades, dos dados de diez caras pueden funcionar como un dado de cien. En los dados verde y negro de la imagen, por ejemplo, el resultado es un 34 si previamente se ha determinado que «marca el verde».