La moneda se emitió en pequeñas cantidades para determinar si el dólar de plata reintroducido tendría buena recepción del público.
También le pidió al naturalista Titian Peale que diseñara la moneda.
Sully creó un diseño en el anverso que muestra una representación de la Libertad sentada y Peale se encargó del reverso, el cual representa un águila calva alzando vuelo.
Más tarde ese mismo año, el presidente Andrew Jackson levantó la prohibición a pedido de Moore.
En junio de 1835, Moore renunció a su cargo como director y fue reemplazado por Robert M.
[5] Poco después, Patterson se comunicó con dos conocidos artistas de Filadelfia, Titian Peale y Thomas Sully, para crear un diseño que sería usado en la mayoría de las monedas estadounidenses que estaban en producción.
[6] Patterson prefería un águila en vuelo porque creía que el águila heráldica comúnmente utilizada en las monedas estadounidenses era una «mera criatura imaginaria»,[6] y que no era atractiva como diseño.
[10] El 17 de octubre, mientras Jackson y su gabinete estaban revisando el diseño, Woodbury escribió a Patterson otorgando el permiso para continuar con la creación de matrices para las nuevas monedas basadas en las impresiones.
[10] En enero de 1836 se llevaron a cabo pruebas en metal blando.
[11] Patterson luego autorizó la producción de un troquel del anverso en acero, mientras que el reverso aún no se pudo crear porque Peale todavía tenía que completar su diseño a satisfacción de Patterson.
[11] A pesar de la aprobación del diseño por parte del director, le indicó a Peale que continuara hasta que Patterson estuviera satisfecho.
Evidentemente, esto se logró, porque Patterson hizo que Gobrecht comenzara a trabajar en una matriz inversa en junio.
[17] El historiador numismático Walter Breen afirma que esas piezas acuñadas antes de la aprobación de dicha ley son técnicamente patrones (monedas creadas para probar su diseño, composición u otros puntos), ya que no fueron autorizadas por el Congreso.
[10] Todos los dólares de Gobrecht reemitidos, cuando se inclinan sobre su eje, representan una orientación diferente en el vuelo del águila del reverso, en lugar de dirigirse hacia arriba, tal como aparece en las monedas acuñadas durante la producción oficial.
[25] Aunque acuñadas en pequeñas cantidades, todavía existen suficientes piezas para armar series coleccionables completas, y su precio, a diferencia de los dólares del cabello suelto y del busto drapeado, rara vez superan los 100 000 dólares.
[27] En la misma subasta, una pieza de 1838 clasificada Proof 64 por el PCGS alcanzó los 82 250 dólares.