- 567) fue el último rey de los gépidos en el siglo VI.
En el año 565 estalló la guerra entre lombardos y gépidos, quienes ante la superioridad de los lombardos buscaron ayuda del emperador Justino II de Bizancio prometiendo entregar a cambio la ciudad de Sirmio (actual Sremska Mitrovica en Serbia), su capital.
Sirmio será entregada a tropas bizantinas para que las fuerzas gépidas que la guarnecían se incorporen a la lucha.
[1] En 567 los aliados lombardo-ávaros derrotaron totalmente a los gépidos, matando a su rey y repartiéndose todos sus territorios con los ávaros, mientras Justino II retendrá Sirmio.
El rey de los lombardos, Alboino, decapita a Cunimundo utilizando su cabeza como copa.