El origen del término cultura de los kurganes se debe a la arqueóloga lituana Marija Gimbutas (1921-1994), que lo utilizó en 1956 para englobar a una amplia variedad de comunidades originarias de las estepas del medio y bajo Volga, que, según ella, habrían invadido la Europa central modificando su carácter étnico y cultural.
A veces son estructuras muy complejas, con subdivisión del espacio y cámaras interiores, que conforman una macrotumba con diferentes habitaciones.
Fue predominantemente nómada, pero se practicaba la agricultura en las orillas de los ríos y había algunos poblados fortificados.
La característica principal de la cultura son las inhumaciones en tumbas excavadas en el suelo y con un túmulo (kurgán).
El individuo se colocaba en decúbito dorsal, con el cráneo en la orientación noroeste, los brazos estirados al lado del cuerpo y las piernas paralelas (Bendezu-Sarmiento, 2006).
También los sármatas, hunos, cumanos, kipchak y los pazyryk practicaron este tipo de enterramientos.