Cuarta ola del feminismo

La cuarta ola del feminismo es una adaptación histórica sobre el movimiento feminista que plantea la existencia desde la segunda década del siglo XXI de un nuevo momento histórico en la lucha por los derechos de las mujeres.

La cuarta ola está considerada como continuación histórica de la primera ola del feminismo marcada por la reivindicación del voto para las mujeres con el movimiento sufragista en la segunda mitad del siglo XIX, la segunda ola con el movimiento de liberación que se desarrolló a lo largo de los años 70 y 80 del siglo XX vinculada a otras demandas, como los derechos reproductivos y sexuales[1]​ y la tercera ola cuya conceptualización inicial se atribuye a la escritora y activista feminista Rebecca Walker cuando en 1992 publicó en la revista Ms: "Becoming the Third Wave",[2]​ una tercera ola vinculada a la diversidad que implica el “ser mujer”, en términos de clase y étnicos.

La Cuarta Ola feminista recupera a las mujeres como sujeto político, señala la filósofa Alicia Miyares[8]​ y entre los principales objetivos se sitúa el completar la agenda inconclusa de la paridad, que no se ha extendido más allá de la paridad en la representación política: periodistas, deportistas, científicas, académicas, editoras, juristas, actrices, etc.[8]​ La británica Prudence Chamberlain señala que el objetivo central de la Cuarta Ola es la justicia para las mujeres y de manera particular la denuncia contra el acoso sexual y la violencia hacia las mujeres.

[9]​ Luisa Posada Kubissa, considera que la Cuarta Ola es un movimiento reactivo y una rebelión contra la configuración del "patriarcado violento" expresado según la filósofa y teórica feminista con la violencia en sentido amplio: como violación, como acoso, como maltrato, como asesinato, como desigualdad económica y laboral, como pornografía, como prostitución, como trata… Hoy habría que añadir otros fenómenos de este poder sexualmente expresado, como la práctica de los vientres de alquiler.

[1]​ Frente al desarrollo de un neoliberalismo caracterizado por frenar los avances legislativos y de políticas públicas encaminados a conseguir la igualdad de derechos para las mujeres[11]​ la Cuarta Ola del feminismo se configura como una respuesta sociopolítica, filosófica, económica y cultural que se suma al movimiento asociativo generando espacios que invitan a reflexionar, debatir y proponer soluciones prácticas y medidas legislativas que protejan la igualdad de las mujeres, sus derechos fundamentales y ayuden a erradicar la violencia machista en todas sus manifestaciones a nivel global.

Londres, Día Internacional de la Mujer 2017