Cristóbal Vela (c. 1588-1654), fue un pintor y dorador barroco español, de formación manierista.
[2] No resulta fácil, sin embargo, conciliar tales afirmaciones con los datos documentales disponibles en relación con este pintor, a quien se encuentra en 1610 trabajando en Sevilla, donde es posible que tuviese lugar su formación.
Allí contrajo matrimonio con Catalina Garrido y nació su hijo, Antonio Vela Cobo (1629-1675), pintor, escultor y dorador, que mantuvo abierto el taller paterno a la muerte de éste.
Así consta que en 1645 se hizo con las pinturas del retablo mayor de la catedral, en competencia con Antonio del Castillo, sustituidas en el siglo XVIII por otras de Antonio Palomino.
También para la catedral pintó los lienzos de San Acisclo y Santa Victoria, que al ser rechazados por su tamaño donó a la ermita de los Santos Mártires o de Colodro, «donde como les falta la altura, y distancia, que debían tener, parecen unos gigantes».