Desde un tiempo anterior, Comercial Mexicana comenzó a operar derivados de tipo mark to market; los cuales eran benignos para Comerci.
[1] La Controladora Comercial Mexicana apostó a un fortalecimiento (apreciación) del peso comprando deuda monetizada en dólar.
Fue así que mediante negociaciones, amparos y pequeñas promesas, la Comercial Mexicana absorbía los casi 140 millones de deuda diarios.
Este conflicto se alargó hasta diciembre del 2008 y fue en esta fecha que varios bancos citados entablaron una demanda mercantil contra esta empresa.
[14] Por ende, Soriana y La Comer fueron informadas de la restricción condicionada de la compra-venta, por lo que determinaron que Grupo La Comer conserve catorce tiendas y sean trece las elegidas a vender; informándolo en sus respectivas páginas.
Hay planes, en todo caso, de vender el único restaurante que le quedaría a la nueva compañía.