Convección
La convección se produce únicamente por medio de materiales fluidos, la evaporación del agua o líquidos.A diferencia de la radiación, la cual no necesita un medio para que ocurra la transferencia.Si, por ejemplo, colocamos un termómetro directamente ante el fuego, pronto comienza a subir, indicando un aumento de temperatura.En este caso, el calor se ha abierto camino a través del espacio entre el fuego y el termómetro, por el proceso denominado radiación.En la actualidad no existe en nuestro idioma ningún término empleado para denotar este tercer modo de propagación del calor; pero nos aventuramos a proponer a tal efecto el término convección, [en nota a pie de página: [latín] Convectio, llevar o transportar] que no sólo expresa el hecho principal, sino que también concuerda muy bien con los otros dos términos.La convección en la atmósfera terrestre involucra la transferencia de enormes cantidades del calor absorbido por el agua.Forma nubes de gran desarrollo vertical (por ejemplo, cumulus congestus y, sobre todo, cumulonimbos, que son los tipos de nubes que alcanzan mayor desarrollo vertical).Al alcanzar una altura muy grande (por ejemplo, unos 12 o 14 km) y enfriarse bruscamente por la baja temperatura atmosférica a dicha altura, pueden producir tormentas eléctricas, granizadas e intensas lluvias, ya que las gotas de lluvia van aumentando de tamaño al ascender violentamente y luego se precipitan hacia el suelo bien sea en estado líquido o en estado sólido.La subsidencia es el fenómeno inverso a la convección, por el cual, el aire a gran altura se enfría considerablemente y forma una zona anticiclónica que desciende por su mayor densidad trayendo hacia la superficie terrestre aire frío y seco, que puede dar origen a remolinos de polvo y hasta tornados cuando se ponen en contacto con una zona de convección.El vapor asciende hasta cierta altura y al hacerlo, pierde calor, se condensa y forma las nubes, que están constituidas por gotas de agua muy pequeñas que se mantienen en suspensión a determinada altura.Por último, parte del agua que se precipita en los continentes e islas pasa de nuevo a la atmósfera por evaporación o produce corrientes fluviales que llevan de nuevo gran parte de las aguas terrestres a los mares y océanos, con lo que se cierra el ciclo, el cual vuelve a repetirse.Cuando el fluido absorbe calor sus moléculas se aceleran por lo cual su temperatura aumenta y su densidad disminuye, lo que lo hace más liviano.Esta transferencia térmica se realizará hasta que los dos tengan igual temperatura; mientras se realiza el proceso las moléculas con menor densidad tenderán a subir y las de mayor densidad bajarán de nivel.Si la propiedad variable es un gradiente de concentración, se conoce como convección solutal'.También se ha propuesto para Europa,[6] y otros cuerpos del Sistema Solar exterior.Un ferrofluido es un líquido que se magnetiza fuertemente en presencia de un campo magnético.En un entorno de gravedad cero, no puede haber fuerzas de flotación y, por tanto, no es posible la convección, por lo que las llamas en muchas circunstancias sin gravedad se asfixian en sus propios gases residuales.